sábado, 15 de mayo de 2010

El Catalejo (5) La democracia amenazada

Hace unos días un periódico de tirada nacional informaba de que los servicios secretos de algunos países investigaban supuestas reuniones de magnates financieros que conspiraban para realizar maniobras especulativas con las que ganar mucho dinero a base de hundir determinadas empresas o desestabilizar a algunos países. No sé si eso tiene visos de realidad o es otra extravagante tesis conspirativa. No hace mucho tampoco también se informaba de que un bulo intencionado sobre la inminente quiebra de la economía española había desatado una nueva oleada de pánico en los mercados. Esto significa que grandes cantidades de dinero pasan de unas manos a otras en cuestión de segundos. Ahora se acaba de saber que esas todopoderosas agencias de calificación de riesgo (ante las que tiemblan los ministros de economía) no son tan transparentes como se pensaba y obedecen a oscuros intereses. Las multinacionales deslocalizan empresas sin problemas, condicionan las políticas de muchos países y juegan con la vida de miles de trabajadores en función de asegurar su balanza de resultados. No hay un solo partido que se atreva en un periodo electoral a especificar en su programa político las 'medidas de ajuste' que luego ponen en marcha, siempre 'obligados por las circunstancias' y pensando en el 'interés general'. Si a esto le añadimos que quienes controlan el cotarro, léase presidente del FMI o del Banco Central Europeo, por poner dos ejemplos, no han sido elegidos 'directamente' por la ciudadanía, empezamos a tener la sensación de que no tenemos absolutamente ningún control sobre aquello que más influye sobre nuestras vidas: la economía.
El resultado de todo esto es una merma ad infinitum de la calidad de nuestra democracia. Estamos para decidir sobre lo accesorio pero no sobre lo esencial. Las alternativas no tienen cabida en un mundo donde todo está atado y bien atado. Durante años hemos vivido en el espejismo de una sociedad de consumo sin límite, en un mundo de crédito ilimitado, en un oasis capitalista donde ya ningún sobresalto nos esperaba, donde la pobreza y la exclusión estaban convenientemente ocultos bajo la alfombra. Ahora se nos revela la verdadera cara de la historia. Los bancos, a los que hubo que inyectar ingentes cantidades de dinero público, los consejos de administración, los grandes inversores, los que ganan millones con solo ponerse delante del teclado de un ordenador, necesitan sus márgenes de beneficios. A eso lo llaman 'darle tranquilidad a los mercados'. ¡Menos mal que ya llega el Mundial de Fútbol!
PD: gracias a El Roto, de nuevo.

5 comentarios:

  1. Estupendo el chiste. Todo ello es consecuencia del ejercicio oculto del poder sordo, ciego de algunos desequilibrados con muucho poder para manipular.
    En cuanto a la banca, algunos son una panda mangantes, pero te puedo asegurar que el B.C.E. trabaja con toda decencia, y existen mentes muy eficaces poniendo su empeño en que el sistema de moneda unica europea funcione. Esta imbuido del pragmatismo germanico, aunque sea europeo. Conozco el percal, mi hijo trabaja allí y he departido con bastantes personas "guapas" que trabajan a niveles bancarios muy altos. Concretamente en el departamento de mi hijo trata de "controlar" la banca privada exigiendole sistemas de garantía. La presidencia cambia cada ocho años y el B.C.E. tiene una clara politica de ahorro, te lo aseguro.
    La Merkel esta furiosa con Grecia y tiene que tragar, porque Grecia engaño mucho para entrar a formar parte del euro y los demás haciendo proyección de su credibilidad se lo tragaron.
    En fin, complicados malabarismos en un periodo de cambios rapidos y drasticos de nuestra civilización. Lo bueno es que somos testigos, sufridos las mas de las veces, pero testigos de tiempos de colapso tan interesantes. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Leo, ¿qué leo?: "Los bancos, a los que hubo que inyectar ingentes cantidades de dinero público," después de la coma añadimos que los funcionarios lo iremos pagando poco a poco ,a plazos. Así, amigo Damián too queda en casa.
    Salud-os

    ResponderEliminar
  3. Esto es lo que cae. ¿Qué nos espera? nadie lo sabe o a lo mejor sí.
    un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Emejota: con esa información de primera mano respecto al BCE no puedo decir nada. No suele ser habitual que uno hable del BCE y te salga un 'seguidor' tuyo que tiene un hijo trabajando en él, ja...ja...
    Pues eso, los funcionarios volveremos a la época de Larra, lo veremos.

    ResponderEliminar
  5. Un saludo Damián!!
    Al leer tu entrada no me he podido reprimir. Así que ahí va mi desahogo:
    - Aaaay "Don Dinero" !!!!
    - Esto me hizo recordar aquella frase: " el fútbol es el opio del pueblo". Ingenuo de mí que pensaba que en este país había algo de "madurez democrática" después de tantos años.
    - Y, por último, la sartén por el mango la tienen unos pocos, pero los sartenazos los aguantamos todos....

    ResponderEliminar